ENTRE ROSAS INDELEBLES,
TE RECUERDO
"En nombre de una noche nostálgica"
"Las rosas están insoportables
en el florero" (J. Sabines)
Lo que quieres es que pierda todos mis sentidos
para que no te vea, no te mire, no te hable
y aunque todo esto sucediese, tal vez,
ni el remedio de un Alzheimer serviría para olvidarte.
Con palabra y con profundos sentimientos
que se embarcan dentro de la agonía quizá, o entre
recuerdos dulces y a la vez amargos sé, que lo que
anhelas es que me pierda en otra mirada, en otros brazos,
en otras letras, más que en las tuyas que ahora se
convierten en dolor y pena.
Como una rosa muerta me dejas en el florero
porque ya no te sirvo, quizá nunca te serví y ahora
con tu remordimiento ruegas perdón y lamentas por
dejarme, pero que inaudito es, pues dentro de la mierda
de un basurero es difícil rescatar el corazón puro de una
rosa maltratada, rechazada y triste, es complicado rescatar
esas espinas que ya están más que desprendidas
ya ni coraza queda, para protegerte rosa.
¿Sabes? se acerca Abril, donde han de decir que las
flores no nacen de alegría, sino de dolores, tal vez allí
he de estar, dentro de las sombras indelebles
de saudades irrecuperables que tú y yo
lastimosamente nos causamos.
Empero, el tiempo ha pasado y, dime ¿Cómo he de
olvidarte?, si fuiste tú, quien me dejó con estas eméticas
emociones que tan difíciles son de borrar. Ah! y dime
¿Cómo he de olvidarte? pues las lágrimas que derrame por ti
por nuestro amor, de ese que tanto nos juramos, ¿recuerdas?,
aquella noche en que tu cuerpo y mi cuerpo se unieron
para convertirse en un solo. Si, aquella noche aún marca
mi alma, pues aquellas palabras nunca las volviste a
susurrar en mi oído.
Cuanto extraño tenerte dentro de mí, como esa noche de
otoño, en que la Luna llena brillaba con tus ojos.
Tú que te unías a mi mirada y yo me unía a tu piel como
entrañable espina a su rosa, como incesante diástole
a su sístole y como tus labios a los míos cuando susurrabas
que me amabas y yo atenta te escuchaba y soñaba
con que no pararas, ni de tocarme, ni de decirlo.
Con orgullo me voy y con dolor te quiero.
Euterpe & Fernández
(12-01-2011)