domingo, 29 de diciembre de 2019

INDICIOS 55




Tu bien sabes que son 17 veces las que me he perdido y es como un contrapeso que fluctúa de un lado a otro dentro de mi interior, y es que avanzo dentro de conversaciones extrañas entre personas que no entienden mi sentir, la soledad me mata y te extraño porque sé que contigo habrá un “siempre” unido entre nosotros, ya no sé perfectamente a dónde quiero ir, porque ya no te tengo entre mis manos. Ahora estoy en deuda con el destino, navego entre las horas del tiempo intentando imaginar lo divino…lo puro; beso otras bocas, pero no es lo mismo, recorro otros cuerpos, que no son poesía entre mis versos, quiero escucharte (aunque sea una vez) decir “lo siento”, pero tus palabras ya no son las mismas, aunque las finjas, tus labios no son los mismos. Sin embargo aquí continuare, eres la plegaria en mi cartel del desconcierto

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 54




Te miro, y no existe posibilidad alguna de enamorarme de vos, la vida es un boceto que no tiene palabras precisas y tú, un borrador sin cuadros, un ensayo sin citas, un despertar sin cielo. Estar contigo es como un baso en el vacío de la inexistencia, acaparas mi irrealidad y me llevas al infierno de lo incierto, allí donde los demonios se constriñen; tanto desearte me ha vuelto loca, y cuando por fin te tuve no hallé diferencia alguna ¿cómo soportas tanta ironía?  Yo muriendo por vos y tu…hundiéndote en tus deseos. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 53



A lo mejor no debí haberme estado tanto tiempo en la playa con mis amigos, son la una y media de la tarde. El sol. Caminar con mis amigos y mirar a todo el mundo. Santa Martha a estas horas es una ciudad extraña.

Ya no deseaba regresar a la playa, me sentía un poco mal. Sin embargo, yo tenía que irme, sonreí entre tanto dolor y empecé a caminar toc toc toc por las calles resquebrajadas. Me metí las manos a los bolsillos. Recorrí muy lentamente las calles, la playa que se iluminaba en un resplandeciente espejo, todo era dolor y vacío. Mis amigos decían que me había insolado, todo parecía estar confabulando contra mí. Ese sol que se está llenando desde hace cuatro días y hoy es cuando está más lleno. Hoy es el día del peligro. 


Me duele la cabeza, y todo arde. Este día no saldré de los límites de mi piel. Mis amigos veían todo, pero callaban. Eso era lo peor: callaban. Y es que en su silencio comprendíamos que se nos iba algo de la vida. Yo y él Él y yo Nosotros y ellos todos.  

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 52



Llueve fuertemente casi atravesando el cielo poniente un refocilo de creación cae de a pedazos desde el mirador del aliento, puro matiz de la naturaleza que como un sueño pondera la consciencia de nuestra vida que aún no ha envejecido, pero que se puede ver pasar como un cruce ambulante que espera escondido el silencio que se rompe como un vidrio precioso.

Lo conmovedor o irónico de regresar al pasado está implícito en cada uno de los momentos gozosos de viajar, pues uno sabe que la primera alegría jamás será recobrada, y el viajero sabio aprende a no repetir sus éxitos sino a ir tras nuevos lugares todo el tiempo, aun cuando el encierro se convierta en laberinto, y el silencio me cierre las fauces de los ojos, me convertiré en fénix y sobre mis alas rojas y fogosas quemaré el desconsuelo propia de los humanos tristes que añoran el silencio. Pero correré el riesgo de ser ola ante un torbellino, para hacerme fuerte y aun con todo y nada salvar mi alma.


Y es que los pasajes que recorrí por la casa de mis abuelos me abrieron las puertas del alma para salvaguardar mi destino; y es que deje la felicidad cuando aún era una niña, en la adolescencia me quede al lado inmóvil de la vida buscando en la lectura y la escritura alguien que con un verso me consolara, y de repente la nada se convirtió en mi todo. El único club de amigos al que pertenecía eran a los pocos escritores que en los baños del colegio y en mi habitación a escondidas podía leer, solo para no sentirme sola, y apenas era feliz. La vida desde entonces ha sido una sombra errante, así como el túnel solitario de Sábato, la celda de Caicedo y el paracaídas de Vicente Huidobro.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

viernes, 27 de diciembre de 2019

INDICIOS 51



Los filósofos, esos que de tanto se burlan, son seres notables, sus doctrinas han avanzado y seguirán avanzando, porque es una práctica y tiene vida. Sin embargo, solo una minoría ha sido capaz de estudiar y rumiar este tipo de materias y muchos no han llegado a comprenderla.  Una filosofía indiferente ante las riquezas, hacia las comodidades actuales y posmodernas de la existencia, el desprecio por el sufrimiento humano, el suicidio y la muerte, una filosofía que desprecia este tipo de situaciones no es filosofía, y que al estilo Chejov nos hacen dar cuenta de que esta es la vida entera, propia de ningún desprecio. Por ello la filosofía tiene futuro, porque lo que progresa en el mundo, es la lucha por la sensibilidad ante el dolor y la lucha por la propia existencia. Es innegable comprender, entonces, la vida como algo perdurable, que evoluciona según la sociedad humana representada, y que inscrita en la experiencia se esfuerza por una existencia con un clima otoñal y estival. Todo lo que necesitamos estriba en los hechos, no como verdades absolutas, sino como virtudes que motivan a los hombres como un todo, que a través del arte profundizan en el conocimiento, tenemos como punto de vista la felicidad representada desde una condición humana que viene de la antigüedad.

En este orden de ideas, revolver la memoria hace parte de una necesidad interior e inmutable, que consiste en reconocer la esencia de la existencia, como sustancia. No optando por el escepticismo, sino planteando de alguna manera cómo evolucionar, de tal modo que habrá de asentarse en el porvenir de una humanidad que en la posmodernidad intente sopesar en el desarrollo de sus particulares sobre los generales. Esta nueva cultura construida en la base de países primer mundistas desechan la denigración del ser humano que llevaría como dice Nietzsche a "una actitud lógica del mundo y de las cosas", suspendiendo entonces el juicio propio de la existencia.  Este ejercicio, se haya menoscabado por pensar en el mundo de hoy como una esfera incambiable, que vive en el engaño de las grandes potencias dejando de lado la emancipación, esa que es tan necesaria para la madurez de países tercer mundistas, atados a la voluntad y al dominio antagónico del pensamiento que es incapaz de liberar el espíritu de sí mismo, y que regresa a la vida, a medias. Por ello, esa ciencia de vivir, se ve condicionada al desarrollo mezquino y rudimentario de una vida sin futuro, que rige nuestro presente. La filosofía entonces, se presenta como esa disciplina que evoluciona, que nos regala un poco de virtud y modestia en esos campos tan objetivos de mayor profundidad y significación posible, pues es importante que el conocimiento por la existencia humana cobre el máximo relieve posible, sin importar las circunstancias que agobien la era actual que estamos viviendo.

Por ello hay que someter a juicio esa filosofía que se opone a lo arbitrario como un modo subjetivo de tratar la historia y la razón desde un fin objetivo e imparcial, donde se conceda a la historia acontecimientos y acciones que guarden relación con ese fin objetivo, los cuales como expresiones intuitivas aumentan en el historiador rasgos subjetivos e imparciales representados en un para sí, en donde proceda la verdad y la búsqueda del bien. Los acontecimientos de la inteligencia divina han de ser inmutables, regidos en una cadena indisoluble que se aproxime a la estabilidad de los juicios íntegros de lo que es bueno y de lo que es malo, “ya que los que unos juzgan dignos de recompensa, otros los consideran merecedores de castigo”; el juicio entonces, es la facultad de pensar desde lo particular sobre lo universal, si el juicio es tomado desde lo universal es determinante, pero si el juicio se rige desde lo particular el juicio es reflexionante, sin embargo ¿qué significa esto?, el juicio en definitiva modifica los conceptos generales y trascendentales de la naturaleza desde un entendimiento a priori los cuales rigen la naturaleza desde su finalidad bajo predicados ontológicos que al final se convierten en principios metafísicos.

Se suma a lo anterior que los cambios naturales con relación a las leyes empíricas, deben estar basados en el principio de la finalidad, ya que los objetos que se convierten en representaciones se acomodan al entendimiento humano, cuya finalidad es encontrar lo universal sobre lo particular, y así progresar en el uso del entendimiento y adquirir conocimiento. Conocimiento que de aludirse al fin de todos los tiempos ha de tropezar en lo moral como perteneciente a los seres suprasensibles, cuya idea de fin se hace tangible gracias a sistemas unitarios que concede a los hombres la “eterna bienaventuranza”, bajo el dominio de principios buenos o malos (moral); estados morales que conforman el fin final de la existencia desde inusitados acontecimientos externos e internos, de donde se desprenden en fin natural, el fin místico y el fin contranatural. Para finalizar, encontramos un fin final para todas las cosas, pues la eternidad es una utopía, donde no hay fin alguno y la pregunta que surge es ¿cómo prepararnos a los eventos tumultuosos que vienen?

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 50



Si me pongo a reflexionar sobre mí misma y desde qué momento me deje a un lado, podría decir que aproximadamente hace cuatro años deje de dibujarme en mi mente y en mis sentimientos el deseo del tiempo. Puedo presentir que el día en que aquello ocurrió fue cuando de repente dejé de amar la vida y valorarla, y el problema de ello fue cuando puse toda mi vida en una persona, cuando creía que el amor era infinito e inagotable, y entonces me di cuenta que el amor se acaba, que el amor también se extirpa, que el amor también se agota y que inesperadamente se pierde. Entonces fue allí donde comencé a vivir en un pasado perpetuo que aún no termina y un presente inexistente.

Retomar hoy el futuro, es como pedirle a mi alma que tan solo por un instante se deje “vislumbrar”; alguna vez pensé, que si iba a escribir sobre mí misma era porque había encontrado en la vida las respuestas que necesitaba para seguir existiendo, sin embargo han pasado diez años y lo que sólo tengo son más preguntas para resolver, además de eso, se suma el miedo y la vergüenza de la existencia, pero hoy hago una súplica al cielo y le pido a mi alma que me regale un espacio, tan solo un poco de espacio para escribirle a este tiempo, que muchos desean que llegue, porque es en el futuro donde el sol siempre sale sobre el horizonte, o esa luna llena de hermoso brillo que aparece para guiar el andar de aquellos vespertinos que recorren el mundo bajo su sombra.

Quiero atreverme a pensar que el futuro es un presente tardío, el cual pocos logramos disfrutar, el futuro es como el puente que divide la vida y que renueva el oxígeno de los ya fatigados, es el bastón que encuentra todo aquel quien decida seguir su recorrido, temiendo siempre a que otros tiempos se inmiscuyan para que de alguna forma caiga de rodillas ante la muerte, que siempre espera ansiosa de aquellos ancianos atormentados y reumáticos que cargan en sus espaldas las jorobas de la desdicha y de las culpas del pasado y que van pasando por el tiempo recordándole al mundo sus faltas, reavivando sus rencores y orinando en la puerta del futuro.

El tiempo es como un cielo y un infierno, los cuales todo ser humano carga con ahínco y otros con castigo, yo no culpo al tiempo, pero sé que mi joven futuro se encuentra afligido y lo he alimentado durante muchos años por mis inseguridades y predisposiciones, mi futuro ha crecido tan inseguro y tembloroso que apenas puede caminar o hablar por sí mismo. Ya le había visto. De vez en cuando se escondía entre los arbustos y afuera sentado al frente de mi habitación, y con sus piedras ha quebrado en varias ocasiones los vidrios de mis ventanas, gritando insultos balbuceados y luego huía torpemente por las calles de la ciudad. Sé también que no soy amiga del tiempo, soy enemiga del pasado y estamos en proceso de reconciliación, entonces el futuro es como mirar un túnel donde se es imposible vislumbrar las luces de los trenes que desde hace mucho no llegan a la estación, sin embargo si de aquí a un año, cinco años, veinte años se atreviese a pasar alguno por acá, no duraría en subirme al primer vagón, para empezar allí otra historia personal, podría entonces ver en mi rostro la satisfacción de aquel que reconoce cuando un instante es perfecto, de aquel que se impregna de la inmensidad que se desborda ante ella y la deja entrar para que esta la transforme. Entonces quizás llegue el momento en que despojada de culpas me levante, y por primera vez camine libre hacia el firmamento, inmune a cualquier causa o efecto.

En ese tren que abordaría, recorrería el mundo a través de mis letras, aprovecharía entonces para conocer esos lugares que ahora solo contemplo en la TV, en uno que otro libro o en algún cuento de los cuales ya he escrito, no cabría duda de que escribiría el pasar del tiempo, dedicaría mis letras a la psicología, la filosofía y la literatura. Viajaría si es posible, a todos los rincones del mundo donde pueda difundir mis conocimientos, llenaría mi vida de poesía y la compartiría con todos aquellos que quieran escuchar y aprender a través de mis versos. Dedicaría mi tiempo al aprendizaje constante, a la lectura, y al arte contemporáneo. Desearía entonces, sentarme bajo la sombra de un sicomoro y escribir algunos versos dedicados al amor y a la vida. Aprovecharía de ese viaje para contemplar la vejez de mis padres y lo que estos tengan que aportarme, degustarlo tanto que en su lecho de muerte no tenga nada sobre qué arrepentirme. Aprovecharía del futuro para entregarme en cuerpo y alma al amor, recorrería el tren en búsqueda o compañía de ese alguien que quiera dibujar nuestra historia en pergamino, sin temores, ni prejuicios, amándonos en libertad, y si las circunstancias desean que nos apartemos, que seamos capaces de poder abandonarnos sin el látigo del castigo y el odio por habernos separado. Aprovecharía mi vida para abrirle la ventana a la vejez y aceptaría sin condiciones la llegada del fin de mis días, aceptando ese presente tardío donde pueda decir: “Ahora veo, existo, muero y disfruto aquí, en cada aliento. No hay gritos ni rencores en mi puerta, jorobas ni muletas; y mis ventanas están abiertas, dispuestas a los juegos de las hojas que las corrientes arrastran hasta mi hogar.  Ya no me adelanto a mis pasos, ni doy importancia a mis huellas. Mi boca ríe, saborea las palabras, los frutos y la lluvia que desciende por mi frente con la misma intensidad. Y las nubes llameantes que pasan sobre mi casa regalan a mis ojos su belleza. Ahora soy presente latente en todo momento, y la importancia está en todo, porque todo es importante. La vida es viviendo, y estoy aquí, atenta a su danza, apoderándome de cada instante.”


Aprovecharía finalmente, mi instancia en ese tren como una forma de merecimiento, de oportunidad, de darme la opción de seguir adelante, sin finales ociosos o cortantes, sino con la opción que da el tiempo de vivir infinitamente, inmersa en la posibilidad, pues al fin y al cabo el tiempo no tiene final.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

sábado, 21 de diciembre de 2019

INDICIOS 49



Soy un fénix, que sabe que en cualquier momento deberá morir para renacer de las cenizas, o que simplemente algún día, ya no retornara de ellas porque ha cumplido y escrito su destino y simplemente será una estrella más del firmamento. Pues, solo los luchadores que ponen adelante la dignidad y no el temor a la muerte, pueden consolarse pensando que vivirán grandes cosas a través del tiempo, como el valioso sonar de un violín, o como el hermoso palpitar de un corazón sano. Solo los luchadores que ponen frente a sí el deseo de vivir, en vez de la desesperanza, podrán consolarse pensando que vivirán grandes cosas y que a través del tiempo el vuelo de un ave será suficiente para calmar las almas rotas que en cenizas se encuentran alborotadas deseosas de surgir de ellas.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 48



Sé que allá afuera la vida es insoportable, pero he decidido salir a recorrerlo, para no quedarme encerrada en mi propia jaula o en la jaula de aquellos, que quieren apagar mis llamas porque no soportan mi luz; ya sé que se siente morir, como es hacerte daño en el exterior para matar lo que sientes por dentro, y qué es la soledad, cuando los que están a tu lado te hacen sentir infeliz e inútil. Me encanta mi locura y la respeto, porque no es fácil tener enemigos imaginarios con los que comparto parte de mis días, que me acompañan en mis noches de insomnio y con los que sueño, creyendo que algún día simplemente se irán a recorrer su propio destino; pero ya no les temo y ellos lo saben, nunca más me doblegaran, porque sé cuánto les gusta verme caminar de rodillas.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 47



De repente como un soliloquio o una perorata me vino la idea del Fénix, como una representación de mi alma desgastada, pero como ejemplo de todas mis luchas ganadas, con miedo aun, de caer y trastabillar, pero de ganar el doble en esa lucha de ser una mejor persona cada día. Mis alas empiezan a coger fuerza y poco a poco siento que empiezo a desplegarlas, visualizando ese futuro presente que se acerca donde me veo allí hermosa como un águila en todo su esplendor. No sé qué tan útil u osado sea esto, pero siento que podría ser una representación fascinante.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 46



A veces, uno sólo es capaz de escribir en lápiz, para que lo borren. A veces, todavía no te has levantado y ya estás cansado. A veces, llevas la bandera del corazón y del optimismo a media asta. A veces, sientes que tu pulso está de capa caída. A veces, te resulta difícil tirarte por una cuesta. Es cuando sabes que estás triste, y la sonrisa de tu rostro es una mala mueca. Es entonces cuando crees que la música del azar es muy traicionera. Y que sí, que esta vez te ha tocado a ti escucharla. Crees que el único cuadro colorista que eres capaz de pintar sería usando el negro. Crees que el optimismo es una secta a la que tú nunca pertenecerás.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 45




He estado pensando en una representación o una metamorfosis al estilo Kafka que me haga levantarme de la cama cada día, que me ayude a luchar con la indiferencia del mundo y de los dolores propios de la existencia humana, y entonces vino este deseo que esta entre la fantasía y la realidad pero que asegura de alguna forma mi vida. La de existir, aunque me cueste la eternidad…

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

viernes, 20 de diciembre de 2019

INDICIOS 44



Yo soy tristeza, soy el accidente de mi propia substancia, miro mi miseria y me complazco en ella, intento hacerla a un lado, apartarla y cultivar lo que todos tenemos de divinidad adentro, eso de amor a sí mismo, que tanto me han enseñado durante tanto tiempo. Mi corazón muchas veces siente la pesadez de la lejanía, no lo puedo negar, y muero por abrazarme, por mirarme una vez más, y es que así es el amor lejano, amor de muchas horas de espera.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

jueves, 19 de diciembre de 2019

INDICIOS 43



Tuve que andar sola para aprender a curarme en base al dolor, a ver más allá de los restos de lo que algún día fue para reconstruirme…Y puedo decir, que lo he hecho muy bien. El dolor es el sentimiento de lo conocido, de lidiar con un mundo en el que no hay libertad, y veo muchas personas preguntándose por el sentido de la vida, y ven a esta como una simple desventura, como algo de lo que no se obtiene ninguna recompensa. Y llegue a la conclusión de que la verdadera desgracia es no aprender a existir.


Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

miércoles, 18 de diciembre de 2019

INDICIOS 42



Y sus entrañas se abren al unísono mientras el miedo la cubre ante el vacío hiriente que carcome su corazón. Es el destino, la culpa y la miseria quienes le abren la puerta del infierno, antes de que una voz alucinada y ebria la conduzcan al desespero.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

martes, 17 de diciembre de 2019

INDICIOS 41



A veces siento como las palabras se me escapan por el borde de las alcantarillas. No sé por cuánto tiempo he de soportar este desgarro que se interpone entre mi dedo índice y mi pulgar...

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 40


Tengo ganas de irme, de abandonarme en algún lugar, de refugiarme en el silencio de los que no desean regresar. Pero temo que después de un tiempo, ya nadie me busque ni me necesite.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

domingo, 15 de diciembre de 2019

INDICIOS 39



Y sus entrañas se abren al unísono mientras el miedo la cubre ante el vacío hiriente que carcome su corazón. Es el destino, la culpa y la miseria quienes le abren la puerta del infierno, antes de que una voz alucinada y ebria la conduzcan al desespero.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 38




¿Y dónde dejo esta parte de mí que se rompe a pedazos, que se ahoga en el silencio, que se desespera en el cansancio de los que no duermen y que además, se quiebra ante sus miedos?

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

viernes, 13 de diciembre de 2019

INDICIOS 37



Me haré el favor de callar mi apellido. Y es que no hay melancolía que calle mi gris heredad y esos extraños dominios del pensamiento que se produjeron en el carácter de mis pensamientos más comunes. Las sombras del andar y en la huida del silencio y en las horas negras trastabillarán los primeros días de alegría y de las ruinas volverán los recuerdos que conmoverán el sonido de las hojas que caen de los árboles, ya casi marchitas, sin fuerza para desafiar todo análisis y explicación del mundo que lo rodea.  

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

jueves, 12 de diciembre de 2019

INDICIOS 36


Unos meses e incluso unos años atrás, pensaba en la Filosofía como esa disciplina incomprendida y valorada por pocos; hoy por hoy considero que la importancia de la labor del filósofo debería ser tenida en cuenta en una coyuntura como la que estamos atravesando hoy en nuestro país, la vida y la sociedad se ha ido transformando de tal manera y con tanta velocidad que no termina de esclarecerse, ubicarse, y definirse, configurándonos en la era del vacío existencial que el mismo Viktor Frankl denominó hace unos años en su libro “El hombre en busca del sentido”. Sin embargo, es preocupante los postulados acerca de que hoy en día estamos ante el fin de la filosofía, por ejemplo, Mario M. Pacheco y Norma Durán afirman que estamos ya en tiempos pos-filosóficos, y pos universitarios. Para ciertas corrientes de pensamiento contemporáneo, nosotros, los que nos encontramos hoy día aquí reunidos, pertenecemos al Jurassic Park, esa especie extinta que se niega a reconocer su “sin sentido” y su nadaidad. Por ende, pensar una filosofía hoy es empezar a reconocer la sociedad, la globalización, la planetarización como eventos que están sucediendo y que nos toca vivir, hay entonces que conocer y comprender el mundo de hoy, y para eso debemos cambiar la forma de investigar la realidad. Y todo debe darse desde la academia, debe pensarse desde ya en que debemos cambiar la forma de observar al ser humano, entonces podremos hacer parte reflexiva de estas nuevas dinámicas sociales e intentar reflexionar de otra forma las problemáticas cotidianas. Para ello no podemos seguir sosteniendo que la filosofía es una actividad abstracta e imposible de comprender, ya que por sí sola la estamos sumiendo en la exclusión convirtiéndola en una disciplina etérea, que no es concreta y en la que no se logra ningún resultado; cuando en sí la filosofía lo que permite es acercarnos y abordar la realidad transformando lo cotidiano y resolviendo problemas humanos, como lo dijo alguna vez B. Russell, “Por muy débil que sea la esperanza de hallar una respuesta, es una parte de la tarea de la filosofía continuar la consideración de estos problemas haciéndonos conscientes de su importancia, examinando todo lo que nos aproxima a ellos, y manteniendo vivo este interés especulativo por el Universo, que nos expondríamos a matar si nos limitáramos al conocimiento de lo que puede ser establecido mediante un conocimiento definitivo”. Para concluir, es importante pensar que la filosofía es algo que el ser humano siempre ha hecho, la filosofía como lo resalta Manuel G. Morente antes que cualquier cosa, debe ser vivida. Por ello la filosofía no puede seguir dando una impresión contradictoria de sí misma, pues estamos alejando la reflexión y el pensar que de una y otra forma hacen parte del ser humano, lo que los ubica en clara sintonía con el contenido que guarda la filosofía. En este orden de ideas no debemos cerrarnos a otras disciplinas o formas de pensar, lo ideal es ir articulando la filosofía a los hechos y problemáticas actuales, pues la filosofía también puede ubicarse en el fondo de la historia; como lo plantea Leopoldo Zea, la filosofía debe asumir plenamente su propio desarrollo y acontecer histórico como un elemento constitutivo de sus reflexiones y quehaceres, y desde allí empezar a responder poco a poco las preguntas que hacen parte de esta búsqueda que hasta ahora inicia y que empieza a perpetuarse.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

miércoles, 11 de diciembre de 2019

INDICIOS 35



La locura consiste en construir mundos en pedazos de estiércol, donde la felicidad espera a la luz de un destino comprado donde los hombres y las mujeres rabiosos de apoderarse del cosmos permiten de manera consciente someter sus influencias a cualquier imperfección absolutamente ridícula y absurda, para que así de rotos desatinemos en la preponderancia de la fantasía.   

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

martes, 10 de diciembre de 2019

INDICIOS 34



Sé que deseas un amor de película, pero esto que ves, es todo lo que puedo darte, sin desenlaces de ensueños y sin un amor eterno. Te ofrezco mi ser imperfecto, mi mal humor en los domingos soleados, mi insomnio y mi humor cambiante, mis letras tristes y mis días rotos, pues no hay desolación más grande que esperar algo que nunca va a llegar; te invito a que desnudamos nuestra humanidad e intentemos vivir felices el tiempo que nos permitamos compartir juntos…tú dirás. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

lunes, 9 de diciembre de 2019

INDICIOS 33




A veces siento que buscar refugio en las palabras o en la literatura no sería suficiente para calmar mis pensamientos insistentes como impedimento a mi cercano suicidio. Yo he puesto mi esfuerzo y la vida desgracias, yo he puesto amor y ella silencios. No hay espera más grande que la muerte, la nada, el vacío sin esperar nada a cambio y el reencuentro con los que ya se han ido. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

domingo, 8 de diciembre de 2019

INDICIOS 32




Tal vez nos hemos herido sin querer, tal vez vos ya no me querés como antes, tal vez la eternidad acorto el tiempo, tal vez nuestras bocas se extraviaron en el camino y nuestros corazones se han perdido en el desierto, tal vez el invierno tronco nuestras ramas y el amor ha caído bajo un puente, tal vez el miedo ya reposa en el interior de nuestras almas o tal vez nuestro cariño se ha quedado en ese pasillo del sanatorio silencioso en que incurrimos cuando sin saber nos habíamos perdido en el túnel de la muerte y el desasosiego. Tal vez el silencio ahorco nuestras palabras y ahora yo me encuentro aquí, buscándote a tientas mientras el frío ahoga la esperanza de encontrarte de nuevo. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 31



Me duelen las entrañas, el Malboro pasa por mi garganta como una válvula de oxígeno lo suficientemente profunda como para secar las lágrimas que se posan debajo de mis amígdalas ya negras de tanto fumar. Leo a Sandro Romero y pienso en Charly García, en los 80s, en los 90s, en Cali, en los domingos rotos y los guerrilleros. Ahora todo es diferente con la cuestión de la Internet y los celulares, las cosas se celebran a destiempo porque nada es suficiente para calmar el hambre del capitalismo, pienso en Cerati y en lo agradecido que debe estar al saber que no lo despertaron antes, porque aún no ha pasado el temblor. El mundo se hunde, y pocos nos interesamos por él, no somos activistas, ni creadores de fuentes ambientales reutilizables, ni veganos, ni feministas, o algo por el estilo. Y eso pasa porque sencillamente esperamos a que otros lo hagan por uno, o porque por alguna extraña razón no tenemos la misma energía, de esa que producían nuestras abuelas en tiempos en que la comida era natural, o porque simplemente el cansancio llega a nuestros cuerpos y se instala como una garrapata y entonces, sin darnos cuenta nos despertamos en un cuento de Kafka tratando de no pronosticar los días en los que te escurrirás en el tiempo para besar la vida a la mitad de la lluvia.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 30



Cuando Macondo bajó al solar de su casa en la mañana mientras un sol resplandeciente cubría el cielo con una centelleante luz amarilla, calló de rodillas sobre el pasto verde oscuro intentando inhalar el aire que no hallaba con cada inhalación. A Macondo se le notaba como si llevara cargado sobre su espalda ese pobre destino turbado por los recuerdos que gobernaban su vida hacía ya varios años. Arriba, al fondo de un corredor largo y estrecho en una habitación contigua al estudio, una soga amarrada al cuello de su amada la aprisionaba con tal fuerza que la tortura se hacía incomprensiblemente prolongada. Macondo al saber lo que se avecinaba y con la mano armada hasta su sien mientras rezaba una plegaria, disparó. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

jueves, 5 de diciembre de 2019

INDICIOS 29




Y si el cielo se hundiera entre olas de playas saladas, y del mar lloviera granizo de estrellas, quizás la felicidad no sería una utopía y la vida tendría un mayor sentido. Lloraríamos carcajadas de alegría y reiríamos de espasmos llenos de ilusiones y sueños. Los viejos no serían tan viejos y los niños se columpiarían en nubes de barro hechos dinosaurios de colores psicodélicos como sus amigos imaginarios, que serían también nuestros amigos. El arco iris tendría escaleras cubiertas en salsa de chocolate y la tristeza no la conocería nadie. El sufrimiento tan solo sería una palabra más del diccionario de mitologías y cuentos. Los laberintos de Sábato serían carruseles en forma de unicornios a cambio de caballos blancos desgastados por el óxido y el tiempo. La soledad viviría entre nosotros y el miedo a morir no existiría, porque ya vives en el paraíso. El ocaso compartiría las tardes con la Luna y la noche sería iluminada por el sol mientras el tiempo espera su destino, que no dependerá de él, sino de nosotros. Los humanos seríamos infinitos como los dioses, aunque pocos tendrían ese privilegio. La muerte llegaría en el sexo y la vida de un simple suspiro producto de la unión de dos almas bendecidas por los ángeles, esos amigos de los dioses puros y rebeldes ante la existencia. La música sería el producto de una exhalación con ritmos brillantes al son de los días y los meses del año. Las raíces de los árboles serían finitas y conectarían los continentes bajo puentes subterráneos como los de "Alicia en el país de las maravillas". Los idiomas serían tan universales que un beso como saludo y un abrazo como despedida sería suficiente. La guerra entre el cielo y el infierno no existiría porque el odio, la arrogancia y la desmesura es para los inexistentes que no son capaces de comportarse como humanos, ya que por alguna razón no han desarrollado un corazón suficientemente apto para abarcar esos sentimientos que brotan del pecho cuando alguien hace las cosas con amor y pasión. Por eso, si el cielo se hundiera entre olas de playas saladas, y del mar lloviera granizo de estrellas, la felicidad no sería una utopía y la vida tendría un mayor sentido.

miércoles, 4 de diciembre de 2019

INDICIOS 28




Recuerdo con cariño ese libro que me regalaste a mediados de noviembre y que aun leo porque tengo las letras pegadas en las huellas de mis dedos, especialmente en el dedo índice con el que suelo pasar las páginas, y la caratula ya se encuentra desgastada por el roce de mi bolso de tanto meterlo y sacarlo cuando me daban ganas de leerlo. Pero ahora me quema, me arden los ojos y lloro cuando no logro terminar alguno de esos párrafos que antes añoraba con desolación. Y es que me he dado cuenta que empiezo a olvidarte, a despegarme de ti, te hallo en otro plano que no es nuestro y entonces me pierdo. Y es que solo quisiera decirte que me muero, que me hundo, que mi sombra ya no me sigue, que me encuentro sola entre el hastío y la locura, que no puedo dormir, que me duele la cabeza y las entrañas, que me emborracho hasta que veo el amanecer pronunciarse por la ventana, que me desvanezco de tristeza y desencanto, que el capitalismo me tiene jodida, que no recobro mi sabiduría y la alegría de los días, que muero infinitamente mil veces cuando intento luchar por la existencia de los pobres que ya no tienen sueños e ilusiones, que te necesito pero que ya no te quiero, que lo único que queda es un rostro desfigurado y una soledad prohibida que a medias se comunica con la rebelión que me liberara del adocenamiento y tal vez del suicidio. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20