Eres el recuerdo de mi pobre corazón
Eres la fragilidad que cubre la antorcha
de mi alma
Eres el sueño que abre las ventanas de
mi interior
Eres el nexo sin fin de mi destino
Eres el abismo que distrae la razón de mi
existir.
Juli P. Lizcano Roa
Bienvenidos a la página de Julie Paola Lizcano Roa (Carlotta De Borbonet). Aquí, podrán encontrar algunos textos de la creadora de este blog. Disfruten de sus letras. Pido respeto por los derechos de autor ©, podrían ser denunciados, dado a que son poemas que están en proceso de publicación. GRACIAS
Eres el recuerdo de mi pobre corazón
Eres la fragilidad que cubre la antorcha
de mi alma
Eres el sueño que abre las ventanas de
mi interior
Eres el nexo sin fin de mi destino
Eres el abismo que distrae la razón de mi
existir.
Juli P. Lizcano Roa
Sobre todos los sonidos
me he de imponer ante el silencio y
hablar si es necesario,
mientras salgan los versos de mis labios
puros pues tengo la alegría
de no saber qué hacer con mis
sensaciones
no sé por qué he de estar tan solo
quiero que él me encuentre para
despertar de nuevo.
Juli P. Lizcano Roa
Un recuerdo se aproxima lentamente
mientras un sueño se muestra en la
consciencia de la nada. Si mis latidos
y mis errores, han de buscarte en el
recuerdo de los cielos, la vida ha
de dividirse.
Momentos imperceptibles finge el poeta,
como un dolor entre el destino y la
razón;
olvidemos los caminos y osemos en
emprender
el alma en resguardarnos dentro de
sueños y
memorias que imponen dentro del silencio
las palabras que no callan.
Juli P. Lizcano Roa
Dichosa la naturaleza
perenne, que
se deshoja bajo la luz del
sol de otoño,
que calma con ansias ese
salvaje frenesí,
que se entrecruza entre tu
pequeño corazón
y el mío. ¡Ática imagen!
Marmórea estirpe
entre tus besos rocosos,
ven a despedirte
entre mis penas, porque sé
que allí
permanecerás.
Juli P. Lizcano Roa
¡Oh amado! Si contigo debo
vivir
que no sea para sufrir,
que sea para
maravillarnos de los
reyezuelos de la vida
que a todos conduce, ya
será primavera
una triple mañana y
entonces:
la indolencia no será
ociosa y
las melodías serán tiernas
zampoñas.
Juli P. Lizcano Roa
Cada circunstancia murmulla en el lamento
de mi pobre corazón, y como un sueño inconcluso
pesa sobre la muerte la herida de mi mirada azul.
Derribemos la sombra de lo desconocido,
subamos juntos la escalera empinada
y gritemos al cielo cuanto amamos
esta delicada soledad.
Juli P. Lizcano Roa
Ese vacío que implica estar solo,
ese lado frágil de mi alma,
esa conciencia que se eleva tras bambalinas,
te voy a ser sincera,
merezco lo que he dado:
migajas de amor y odio.
Juli P. Lizcano Roa
Trasladar el ensueño,
cruzar el cielo,
vencer el caos,
enamorar al silencio,
acompañar la lluvia,
yacer los días y las noches,
mendigar la sangre,
negar el miedo,
beber los deseos,
refrigerar el eco de la
muerte.
Conocer la historia,
ceder a la soledad la hora,
abrirse al viento,
explicar en palabras
nuestros deseos,
desenterrar el lenguaje
de los besos, a alguien
que canta en el silencio.
Partir la inercia del sol,
deshilachada de colas
blandas, donde se desnuda
un poema escrito en
sangre sobre un muro.
Juli P. Lizcano Roa
Entre los dueños del silencio
un último abrazo florece
bajo la distancia de los cielos
infinitos, resguardados por
dragones blancos que me
arrastran a las profundidades
de la finitud.
La vida se astilla bajo esta
pared que todo lo remueve
mientras un pájaro enamorado
vuela tras bambalinas
perseguido por un silencio
abrumador como el de la
guerra cuando
se termina
sin edad
sin muerte
sin sombra
sin piedad
sin nombre.
Juli P. Lizcano Roa
Se astilló el aire de los recuerdos
cuando un sueño Arcano se
poso frente a su rostro
embellecido por la música
que cantan los unicornios
verdes demacrados por las
lágrimas que recorren los
caminos ¿qué haré con mi
extraño existir? Pues la
noche sufre mientras
un vacío devuelto por las
sombras se enrolla entre
los relojes adoptando la
forma del tiempo que
se pierde entre el
presente y el fututo
incierto. Se humedecen
las palabras acurrucadas
en el alba de la nada
mutiladas buscan asilo
en mi garganta donde
los dueños del silencio
envían mensajes
de esperanza.
Juli P. Lizcano Roa
Detrás del espejo se esconden
los monstruos que absorben
mi alma
Es la hora del vacío interior
donde un instante se envuelve
en el cerrojo de mis labios fríos
Dios
ayúdame he llegado a mis treinta
años y sin embargo no sé nada
de la vida
¿no he de desvanecerme y reaparecer
en el barco de la inexistencia donde
culminan las luces?
¿Cómo he de quebrantarme las alas de
mis venas para huir de la noche inocua
que me embarga?
Pero insisto en abrazar al mundo
recordando mi niñez, mientras
las flores mueren en mis manos
hechas cenizas por la danza
de mi doliente corazón.
Juli P. Lizcano Roa
La noche cubre la soledad
de soledades, bajo un manto
enjaulado de oro triste que
maúlla en desolada desesperación;
el corazón enloquece bajo la
muerte que se asoma dentro
de los vientos de abril
proclive a los delirios del sol.
Son los demonios sueltos que,
embargan el alma que no baila
junto a la sonrisa que quema
sobre las palomas áridas
de vuelo, donde un instante
grita condenando al tiempo
ahorcarse en la nada
del Universo.
Juli P. Lizcano Roa