martes, 28 de enero de 2020

INDICIOS 75



No estoy triste, estoy es decepcionada. Estoy desbaratada de tanto llorar. La muerte arrulla mis oídos y mis pensamientos. Huyo de todo. Nada me detiene en esta vida. Y todo está peor, odio a todos. No deseo ni vivir ni morir. Solo estoy consciente de que nada se me es dado y que tengo que esforzarme un poco más. Tengo miedo de escribir y de que me lean, pues parece que ya no tengo nada que decir.  

Carlotta de Borbonet©
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

lunes, 27 de enero de 2020

INDICIOS 74



Hoy he dejado de sentirme sola, o tal vez me sienta más sola de lo que nunca e estado, no lo sé… ¿abandonada? Tal vez un poco. Me destruyo de a pedazos con canciones tristes y poesía barata, mi cuerpo no lo soporta más. Se siente asfixiado. Es el precio que estoy pagando por ser ambigua ante la existencia. Poco a poco me doy cuenta que estoy flotando en el aire como un globo sin rumbo fijo. No soy nada. Huyo de las leyes sobrenaturales de la vida, del destino y sus caminos. Desde mi infancia guardo pedazos de recuerdos que me alborotan el alma, y por eso me parece absurda la vida con sus desdenes, con sus ganas de organizarlo todo como si fuésemos máquinas de trabajar y hacer hijos, creo que la vida va mucho más allá de eso, es de hacer cosas excepcionales y me pregunto: ¿cómo me salvaré de todo esto?

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

domingo, 26 de enero de 2020

INDICIOS 73




ELEGÍA A LA LOCURA

En aquella época en la alcoba del hospital giraban las lámparas frías que se trasmutaban con las rejas de la habitación, donde permanecíamos solos. Al llegar las mañanas secas y opacas, los corredores se marchitaban bajo la miel de la locura de los pasillos de los pacientes que la recorrían. Por las estancias cruzaban las sombras de médicos y enfermeras que yertos de agonía nos hacían sufrir horas de inmutable soledad, allí donde Dios no nos veía, era en definitiva un muro desierto donde caminábamos. Junto a nuestros lechos Hades esperaba, a quien le suplicábamos pobres palabras: <hoy sé que no eres tú quien nosotros creíamos, más te queremos mirar y agradecer lo mucho que nos haces compañía con tan frío desdén>.

El sueño era poco ligero, igual que nuestros destinos vigilantes y sin caminos que trazar, jadeantes nos manteníamos bajo las cuatro paredes amuebladas en blanco y gris, rayadas por las uñas de otros pacientes que desesperados marcaban su calendario, prófugos del deseo de libertad. La angustia es mucho mas perversa en las horas de madrugada, donde los demonios recorren nuestros pensamientos incesantes de ansiedad.


Yo podría decir que estamos en un invierno, bajo un aire oloroso a azufre, que podría tapar la mirada bisiesta que se esta cayendo, como se nos está cayendo la vida; ser temporal, ser rocío, ser murciélago, semejante a este cielo cuidado por la lluvia torrencial, llevamos el corazón roto en el rincón del olvido, deseamos con apertura que alguien nos enseñe a encender la llama de la vida…de esa existencia casi inocua, como un adiós sujetos en el vacío. 


Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

sábado, 25 de enero de 2020

INDICIOS 72




Demasiadas cosas que quiero hacer (viajar, por ejemplo), hace unos días estuve en Cartagena y se me vino a la cabeza esa idea de las obligaciones y esa incesante búsqueda mía de soledad, pues una reunión de personas me parece demasiado tediosa, casi una pesadilla como diría Pizarnik. Las obligaciones, por un lado, parecen ser cada vez más riesgosas, pues hay mucho que hacer y poco tiempo para dedicarse a uno mismo o a la familia, es bien sabido que a esta edad nada es para siempre, y que nos entregamos a todo para no quedarnos vacíos; pues que fácil es quedarnos en silencio, ser calma, serenos, cautelosos, poco sé qué me tiene deparado el destino, pero este parece saber más de mí que mi propia madre, y más aún me asiste como un desierto lleno de jeroglíficos, definitivamente es el destino una logia exterminadora que cubre mi existencia y me castiga.


Por otro lado, está la incesante búsqueda de soledad que triste espera con una palabra ser alabada, aún le busco un nombre, podría ser una deidad que cubre mi alma con una luz oscura que llena de mi ser de dudas y preguntas, se anuncia sobre un poema (algunos de esos que me gusta escribir en las noches de abril), la soledad pulveriza mi conciencia, me abandona en algún lugar sin letras, sin manta que me arrope este desligado cuerpo. Soy cobarde, y lo sé, busco el ascetismo como única fuente de inspiración en mi vida, pero quiero ver el crepúsculo que se asoma sobre la poesía de mis labios secos, algo que anuncie de alguna forma que aún vivo. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

viernes, 17 de enero de 2020

INDICIOS 71


Ahora veo, existo, muero y disfruto aquí, en cada aliento. No hay gritos ni rencores en mi puerta, jorobas ni muletas; y mis ventanas están abiertas, dispuestas a los juegos de las hojas que las corrientes arrastran hasta mi hogar. Ya no me adelanto a mis pasos, ni doy importancia a mis huellas. Mi boca ríe, saborea las palabras, los frutos y la lluvia que desciende por mi frente con más intensidad. Y las nubes llameantes que pasan sobre mi casa regalan a mis ojos su belleza. Ahora soy presente latente en todo momento, y la importancia está en todo, porque todo es importante. La vida es viviendo, y estoy aquí, atento a su danza, apoderándome de cada instante.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

miércoles, 15 de enero de 2020

INDICIOS 70



Y ahí estaba yo, en la estación del bus esperando a que llegara esa persona y me diera un beso en la frente, de esos que tienen connotación de protección infinita, de esos que dicen “nunca te abandonare”.  ¿Cuánta desesperación es causada por una serie de desencuentros amorosos por un mal lineamiento emocional? Consecuencia de ello te das cuenta que la persona que amas, no corresponde de tu amor. Los seres humanos necesitamos credenciales que nos hagan saber que somos queridos, no necesitas de algo que de miedo para tener que superarlo. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

martes, 14 de enero de 2020

INDICIOS 69


Una vez que le has hablado a tu sombra, haz de esperar en las ramas de los árboles las voces que atan en grilletes los susurros de los amaneceres en botellas de whisky que hacen perder el brillo de los sueños, cuando lo que deseas es que estos se metan por tus venas, por tus dientes, por tus uñas, por tus poros, por tus sudores tristes. Mientras los días se van demoliendo entre fantasmas y grillos verdes, como los pantanos de caminos inciertos que exilian el llamado de los cuervos que han de devastar la esperanza de aquellos que se esfuerzan por avanzar en el terreno de lo incierto, de lo indeleble, de lo fatídico; pero abrochémonos los pantalones y olvidemos los días en los que eres incapaz de entender el mundo, porque la gloria es el camino que haz de gritar en los poemas de Storni o Mistral, buscando en los ojos que callan el ritmo de los colores que alumbraran tu vida. No desesperes, impregna el humo azul de tus sueños en las playas marquesinas y sobre versos que se encenderán como rosas sobre tu cuerpo, y entonces te darás cuenta que tu corazón no dejará de palpitar.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

lunes, 13 de enero de 2020

INDICIOS 68




Bastan unos minutos para distanciarse de sí mismo y ver que en la soledad no te mereces ni un rastrojo de estrellas, ni una pedazo de cielo amarillo (allí donde se vislumbra el sol), pues muere solo, el que quiera rescatar el pasado cuando no aprecia su futuro; y como diría Benedetti que llegue lo que tenga que llegar, que se vaya lo que se tenga que ir y que pase lo que tenga que pasar.  

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

domingo, 12 de enero de 2020

INDICIOS 67




No bastan las consignas revolucionarias sobre el amor y la libertad, basta el lenguaje convencional para armar la revolución entre un “te quiero” y un “espero”, porque así la rima de la realidad se ve obligada a responder entre los sueños y los deseos, aboliendo las falsas fronteras entre lo ilusorio y lo tangible, hasta lograr lo que deseamos y descubrir el paraíso que llevamos dentro.

El amor por su parte, nunca cansa cuando lo que hay que decir desborda el alma (al estilo Cortázar), al menos es un sustento, una especie de complicidad, un secreto unilateral, una aventura pre-programada, una soledad llena de compañía, un regalo insignificante, un beso momentáneo…inesperado, una gruya hecha de afán, un andar sin rumbo fijo…desubicado, un sin fin hecho verso y poesía, un algo que te deja estancado en la mitad del todo y de la nada, un rayo sin invierno, un olvido, un lunar en el pecho, un abrazo sin brazos…sino con el alma, definitivamente el mejor lugar del mundo para estar…allí entre tus labios y mis labios inapetentes.  

Y la libertad por el otro lado, es un constante querer extinguirse, un querer estar y no estar, un todo o nada, es una gran alegría y a la vez una profunda tristeza, es ausencia de uno y de los demás, es buscarse y encontrarse, es levantarse y caerse, es encuentro y casualidad, es llanto y escándalo, es torpeza y semejanza, es misterio e imaginación, es fuerza y ley.


Las dos acompasadas, generan un gran desorden emocional, atengámonos entonces a que el amor y la libertad son palabras que aunque cortas al escribirse, tienen un gran significado, son como hormigas entre montañas estrechas que una vez encontradas procuraran darle al ser humano el sentido y la dirección que requiere la existencia, propia de una lucha entre miedos que si pretender quererlo lograran explicarlo. 


Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 66



Rompamos las olas y regresemos a las playas blancas color hueso, succionemos los deseos, forniquemos en la quietud de las noches pálidas mientras las horas se pulverizan en los ojos de los soñadores y de aquellos que no se les has olvidado volar sobre el cerrojo de sus labios. A lo mejor, hemos de encontrarnos en los recuerdos que habitan nuestras historias como acantilados llenos de silencios que aguardan al filo de los cuentos de Gabo, devorando esperanzas y aprendiendo amar como golondrinas traviesas.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

viernes, 10 de enero de 2020

INDICIOS 65



El ser humano de nuestras épocas intenta encontrar la felicidad bajo la manta de la posmodernidad, o lo que Schopenhauer llamó eudemonología. Sin embargo, la mayoría de las personas no son capaces de sentir felicidad, son amargados y no son capaces de soportarse a sí mismos, pues cada ser humano es capaz de ridiculizar a otro ser humano y cada uno desde su perspectiva tiene la razón; y como diría Séneca hace falta toda una vida para aprender a vivir. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 64




Un rayo de luz en el amor, es como la esperanza que es propia y que le pertenece a la vida, todo lo que uno desea son esas cosas cotidianas, el olor de su cuerpo, de su cabello, de sus besos, saber lo que piensa de la vida, de <nuestras> vidas…que vaya más allá de la apariencia física, que recuerde con pasión, y que ese recuerdo sea signo de liberación.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

miércoles, 8 de enero de 2020

INDICIOS 63




Me dan ganas de marcharme a algún lugar inexistente, unipolar, un lugar donde sea yo misma, pero siento que mi lugar no se halla en ninguna parte, sobro. El umbral de mi propia existencia perdura entre la trivialidad de la nada, necesito un abrazo que me arrope el alma, que me proteja de tanta soledad que pulveriza mis entrañas, siento una gran desconfianza de mis pensamientos, pues se han vuelto cada vez mas bruscos, mas vagos…escrutando hondo entre mis sentimientos me alejo, pues las voces de mi cabeza no callan, permanezco atónita, callada, temerosa, dudosa, me acerco arbitrariamente a la realidad que se me presenta y admito ver en mis ojos el olvido de la consciencia hecha cenizas. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

martes, 7 de enero de 2020

INDICIOS 62



La arena se escapa entre mis manos, estoy sola, abandonada en la tierra, pero estoy feliz…porque la felicidad tiene la responsabilidad de profundizar en mí, esa parte de mi ser que se esconde y se escapa por las rendijas de mi existencia; algo que imperiosamente no se puede fingir.  Ya es mágico el mundo. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

lunes, 6 de enero de 2020

INDICIOS 61



Son las 16:47 pm y se plantan las horas, como si fuese a decorar mi propia alma con flores de color amarillo pálido, pienso en el cielo nublado y cómo conquistarlo, sin modificar su pasado, sin anular sus lluvias y tormentas. La belleza de la vida es un hermoso misterio que no lo descifra ni la medicina ni la literatura ni mucho menos la filosofía, y podemos estar allí dándonos un lugar en cualquier parte del tiempo como una absolución indiferente, pues cualquier destino por largo y difícil que sea consta de una sola realidad y es eso lo que siempre he estado tratando de descubrir.    

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

domingo, 5 de enero de 2020

INDICIOS 60



Los solitarios no miran hacia adelante por temor a su nostalgia, y permanecen esclavos de su pasado, alejados de Dios y de las religiones, Dios no es más que una alucinación fantasiosa que está en una gran pesadilla llamada Universo. Lo desconocido los mantienen insensibles, sin plenitud de vivir el instante, inseguros, encerrados en abstracciones como mártires, buscando el hundimiento de su propia existencia, ávidos de tormento. Se mantienen huyendo, construyendo muros, arrastrándose a la tempestad profunda y vertiginosa de la corriente exterior, en suspenso al insomnio que comienza a calcular las horas del despertar, profanando la naturaleza sin amar al prójimo, y edificando el camino hacia el exilio. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

sábado, 4 de enero de 2020

INDICIOS 59





La realidad y la vida misma es absurda. Sin embargo, considero a veces (pero solo a veces) que hay que abrirse a la indiferencia que trae el mundo y sus dimensiones humanas. Y es que pienso en la vida de una forma muy particular, en todas sus condiciones vida-no vida, existencia-inexistencia, ser-no ser, etc. Y en todas esas circunstancias no la he amado, parece para mí ser una celda que llena y pobla con todos sus deseos desfigurados. En cierto sentido me desequilibra.

Hubiese querido, no sé, tratar de hablar con ella cordialmente, explicarle de forma fraternal, que hubiese querido sentir por ella algún sentimiento de amor propio, pero siempre he estado absorbida por lo que me sucede, por el hoy, por el mañana, por el siempre…


Pero esperare a que se apague el resplandecer de la Luna para hablarle a la vida de todo corazón, pues no existen grandes padecimientos, ni grandes dolores, ni recuerdos tan profundos y sosegados que hagan olvidar el amor por la existencia, pues en realidad todo se olvida, hasta los más grandes amores. Todo esto que escribo me hace sentir triste, pero a la vez feliz, he ahí lo exaltante de la vida; pues existen diversas formas de ver las cosas y aparecen como si nada. Considero que haber tenido una gran desdicha por la existencia, en cuanto a mi paso por la juventud, me ha hecho ver que esto sirve de coartada para esas desmotivaciones emocionales que tanto nos agobian y nos atropellan en un tiempo en que todo corre muy rápido.  

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

viernes, 3 de enero de 2020

INDICIOS 58



La lectura y la escritura consisten en el goce máximo de la felicidad, pues estas pueden ser como rayos x que atraviesan el alma sin miedo alguno para enfrentar la verdad; pues es de sabios dar con la eficacia de los métodos empleados y no de adoctrinamientos que puedan llegar a ser falsas ilusiones respecto a los imaginarios que ahuyentan la comprensión y la dirección de estás grandiosas entretenciones. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

jueves, 2 de enero de 2020

INDICIOS 57



Hoy la vida renace con ganas de no volver a ausentarse, con ganas de ser más libre como un instante cordial de esperanza; pues de la vida todo se sabe, del amor, de la justicia, de la política y su economía, de la cultura y la recreación, de la literatura y el arte…la vida es una quimera de un solo sentido, a prueba de tontos, dar vida no agota la vida, por el contrario, la aumenta. El termino vida o existencia para un ser humano es demasiado, sin embargo somos obedientes de ser LIBRES! 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

miércoles, 1 de enero de 2020

INDICIOS 56


Podemos imaginar a los solitarios y rencorosos que le dan la espalda a la vida, sin más eternidad que vivir aplomadamente, de forma vulgar y sin esperanzas; pues es en un instante de lucidez que lo vulgar se habrá convertido en ilusión, y así cambiar el idioma de la desesperanza por el de vitalidad.  Si la esperanza no fuese algo así como una solución, nos mantendríamos esclavos de nuestro propio destino. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

domingo, 29 de diciembre de 2019

INDICIOS 55




Tu bien sabes que son 17 veces las que me he perdido y es como un contrapeso que fluctúa de un lado a otro dentro de mi interior, y es que avanzo dentro de conversaciones extrañas entre personas que no entienden mi sentir, la soledad me mata y te extraño porque sé que contigo habrá un “siempre” unido entre nosotros, ya no sé perfectamente a dónde quiero ir, porque ya no te tengo entre mis manos. Ahora estoy en deuda con el destino, navego entre las horas del tiempo intentando imaginar lo divino…lo puro; beso otras bocas, pero no es lo mismo, recorro otros cuerpos, que no son poesía entre mis versos, quiero escucharte (aunque sea una vez) decir “lo siento”, pero tus palabras ya no son las mismas, aunque las finjas, tus labios no son los mismos. Sin embargo aquí continuare, eres la plegaria en mi cartel del desconcierto

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 54




Te miro, y no existe posibilidad alguna de enamorarme de vos, la vida es un boceto que no tiene palabras precisas y tú, un borrador sin cuadros, un ensayo sin citas, un despertar sin cielo. Estar contigo es como un baso en el vacío de la inexistencia, acaparas mi irrealidad y me llevas al infierno de lo incierto, allí donde los demonios se constriñen; tanto desearte me ha vuelto loca, y cuando por fin te tuve no hallé diferencia alguna ¿cómo soportas tanta ironía?  Yo muriendo por vos y tu…hundiéndote en tus deseos. 

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 53



A lo mejor no debí haberme estado tanto tiempo en la playa con mis amigos, son la una y media de la tarde. El sol. Caminar con mis amigos y mirar a todo el mundo. Santa Martha a estas horas es una ciudad extraña.

Ya no deseaba regresar a la playa, me sentía un poco mal. Sin embargo, yo tenía que irme, sonreí entre tanto dolor y empecé a caminar toc toc toc por las calles resquebrajadas. Me metí las manos a los bolsillos. Recorrí muy lentamente las calles, la playa que se iluminaba en un resplandeciente espejo, todo era dolor y vacío. Mis amigos decían que me había insolado, todo parecía estar confabulando contra mí. Ese sol que se está llenando desde hace cuatro días y hoy es cuando está más lleno. Hoy es el día del peligro. 


Me duele la cabeza, y todo arde. Este día no saldré de los límites de mi piel. Mis amigos veían todo, pero callaban. Eso era lo peor: callaban. Y es que en su silencio comprendíamos que se nos iba algo de la vida. Yo y él Él y yo Nosotros y ellos todos.  

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 52



Llueve fuertemente casi atravesando el cielo poniente un refocilo de creación cae de a pedazos desde el mirador del aliento, puro matiz de la naturaleza que como un sueño pondera la consciencia de nuestra vida que aún no ha envejecido, pero que se puede ver pasar como un cruce ambulante que espera escondido el silencio que se rompe como un vidrio precioso.

Lo conmovedor o irónico de regresar al pasado está implícito en cada uno de los momentos gozosos de viajar, pues uno sabe que la primera alegría jamás será recobrada, y el viajero sabio aprende a no repetir sus éxitos sino a ir tras nuevos lugares todo el tiempo, aun cuando el encierro se convierta en laberinto, y el silencio me cierre las fauces de los ojos, me convertiré en fénix y sobre mis alas rojas y fogosas quemaré el desconsuelo propia de los humanos tristes que añoran el silencio. Pero correré el riesgo de ser ola ante un torbellino, para hacerme fuerte y aun con todo y nada salvar mi alma.


Y es que los pasajes que recorrí por la casa de mis abuelos me abrieron las puertas del alma para salvaguardar mi destino; y es que deje la felicidad cuando aún era una niña, en la adolescencia me quede al lado inmóvil de la vida buscando en la lectura y la escritura alguien que con un verso me consolara, y de repente la nada se convirtió en mi todo. El único club de amigos al que pertenecía eran a los pocos escritores que en los baños del colegio y en mi habitación a escondidas podía leer, solo para no sentirme sola, y apenas era feliz. La vida desde entonces ha sido una sombra errante, así como el túnel solitario de Sábato, la celda de Caicedo y el paracaídas de Vicente Huidobro.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

viernes, 27 de diciembre de 2019

INDICIOS 51



Los filósofos, esos que de tanto se burlan, son seres notables, sus doctrinas han avanzado y seguirán avanzando, porque es una práctica y tiene vida. Sin embargo, solo una minoría ha sido capaz de estudiar y rumiar este tipo de materias y muchos no han llegado a comprenderla.  Una filosofía indiferente ante las riquezas, hacia las comodidades actuales y posmodernas de la existencia, el desprecio por el sufrimiento humano, el suicidio y la muerte, una filosofía que desprecia este tipo de situaciones no es filosofía, y que al estilo Chejov nos hacen dar cuenta de que esta es la vida entera, propia de ningún desprecio. Por ello la filosofía tiene futuro, porque lo que progresa en el mundo, es la lucha por la sensibilidad ante el dolor y la lucha por la propia existencia. Es innegable comprender, entonces, la vida como algo perdurable, que evoluciona según la sociedad humana representada, y que inscrita en la experiencia se esfuerza por una existencia con un clima otoñal y estival. Todo lo que necesitamos estriba en los hechos, no como verdades absolutas, sino como virtudes que motivan a los hombres como un todo, que a través del arte profundizan en el conocimiento, tenemos como punto de vista la felicidad representada desde una condición humana que viene de la antigüedad.

En este orden de ideas, revolver la memoria hace parte de una necesidad interior e inmutable, que consiste en reconocer la esencia de la existencia, como sustancia. No optando por el escepticismo, sino planteando de alguna manera cómo evolucionar, de tal modo que habrá de asentarse en el porvenir de una humanidad que en la posmodernidad intente sopesar en el desarrollo de sus particulares sobre los generales. Esta nueva cultura construida en la base de países primer mundistas desechan la denigración del ser humano que llevaría como dice Nietzsche a "una actitud lógica del mundo y de las cosas", suspendiendo entonces el juicio propio de la existencia.  Este ejercicio, se haya menoscabado por pensar en el mundo de hoy como una esfera incambiable, que vive en el engaño de las grandes potencias dejando de lado la emancipación, esa que es tan necesaria para la madurez de países tercer mundistas, atados a la voluntad y al dominio antagónico del pensamiento que es incapaz de liberar el espíritu de sí mismo, y que regresa a la vida, a medias. Por ello, esa ciencia de vivir, se ve condicionada al desarrollo mezquino y rudimentario de una vida sin futuro, que rige nuestro presente. La filosofía entonces, se presenta como esa disciplina que evoluciona, que nos regala un poco de virtud y modestia en esos campos tan objetivos de mayor profundidad y significación posible, pues es importante que el conocimiento por la existencia humana cobre el máximo relieve posible, sin importar las circunstancias que agobien la era actual que estamos viviendo.

Por ello hay que someter a juicio esa filosofía que se opone a lo arbitrario como un modo subjetivo de tratar la historia y la razón desde un fin objetivo e imparcial, donde se conceda a la historia acontecimientos y acciones que guarden relación con ese fin objetivo, los cuales como expresiones intuitivas aumentan en el historiador rasgos subjetivos e imparciales representados en un para sí, en donde proceda la verdad y la búsqueda del bien. Los acontecimientos de la inteligencia divina han de ser inmutables, regidos en una cadena indisoluble que se aproxime a la estabilidad de los juicios íntegros de lo que es bueno y de lo que es malo, “ya que los que unos juzgan dignos de recompensa, otros los consideran merecedores de castigo”; el juicio entonces, es la facultad de pensar desde lo particular sobre lo universal, si el juicio es tomado desde lo universal es determinante, pero si el juicio se rige desde lo particular el juicio es reflexionante, sin embargo ¿qué significa esto?, el juicio en definitiva modifica los conceptos generales y trascendentales de la naturaleza desde un entendimiento a priori los cuales rigen la naturaleza desde su finalidad bajo predicados ontológicos que al final se convierten en principios metafísicos.

Se suma a lo anterior que los cambios naturales con relación a las leyes empíricas, deben estar basados en el principio de la finalidad, ya que los objetos que se convierten en representaciones se acomodan al entendimiento humano, cuya finalidad es encontrar lo universal sobre lo particular, y así progresar en el uso del entendimiento y adquirir conocimiento. Conocimiento que de aludirse al fin de todos los tiempos ha de tropezar en lo moral como perteneciente a los seres suprasensibles, cuya idea de fin se hace tangible gracias a sistemas unitarios que concede a los hombres la “eterna bienaventuranza”, bajo el dominio de principios buenos o malos (moral); estados morales que conforman el fin final de la existencia desde inusitados acontecimientos externos e internos, de donde se desprenden en fin natural, el fin místico y el fin contranatural. Para finalizar, encontramos un fin final para todas las cosas, pues la eternidad es una utopía, donde no hay fin alguno y la pregunta que surge es ¿cómo prepararnos a los eventos tumultuosos que vienen?

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20

INDICIOS 50



Si me pongo a reflexionar sobre mí misma y desde qué momento me deje a un lado, podría decir que aproximadamente hace cuatro años deje de dibujarme en mi mente y en mis sentimientos el deseo del tiempo. Puedo presentir que el día en que aquello ocurrió fue cuando de repente dejé de amar la vida y valorarla, y el problema de ello fue cuando puse toda mi vida en una persona, cuando creía que el amor era infinito e inagotable, y entonces me di cuenta que el amor se acaba, que el amor también se extirpa, que el amor también se agota y que inesperadamente se pierde. Entonces fue allí donde comencé a vivir en un pasado perpetuo que aún no termina y un presente inexistente.

Retomar hoy el futuro, es como pedirle a mi alma que tan solo por un instante se deje “vislumbrar”; alguna vez pensé, que si iba a escribir sobre mí misma era porque había encontrado en la vida las respuestas que necesitaba para seguir existiendo, sin embargo han pasado diez años y lo que sólo tengo son más preguntas para resolver, además de eso, se suma el miedo y la vergüenza de la existencia, pero hoy hago una súplica al cielo y le pido a mi alma que me regale un espacio, tan solo un poco de espacio para escribirle a este tiempo, que muchos desean que llegue, porque es en el futuro donde el sol siempre sale sobre el horizonte, o esa luna llena de hermoso brillo que aparece para guiar el andar de aquellos vespertinos que recorren el mundo bajo su sombra.

Quiero atreverme a pensar que el futuro es un presente tardío, el cual pocos logramos disfrutar, el futuro es como el puente que divide la vida y que renueva el oxígeno de los ya fatigados, es el bastón que encuentra todo aquel quien decida seguir su recorrido, temiendo siempre a que otros tiempos se inmiscuyan para que de alguna forma caiga de rodillas ante la muerte, que siempre espera ansiosa de aquellos ancianos atormentados y reumáticos que cargan en sus espaldas las jorobas de la desdicha y de las culpas del pasado y que van pasando por el tiempo recordándole al mundo sus faltas, reavivando sus rencores y orinando en la puerta del futuro.

El tiempo es como un cielo y un infierno, los cuales todo ser humano carga con ahínco y otros con castigo, yo no culpo al tiempo, pero sé que mi joven futuro se encuentra afligido y lo he alimentado durante muchos años por mis inseguridades y predisposiciones, mi futuro ha crecido tan inseguro y tembloroso que apenas puede caminar o hablar por sí mismo. Ya le había visto. De vez en cuando se escondía entre los arbustos y afuera sentado al frente de mi habitación, y con sus piedras ha quebrado en varias ocasiones los vidrios de mis ventanas, gritando insultos balbuceados y luego huía torpemente por las calles de la ciudad. Sé también que no soy amiga del tiempo, soy enemiga del pasado y estamos en proceso de reconciliación, entonces el futuro es como mirar un túnel donde se es imposible vislumbrar las luces de los trenes que desde hace mucho no llegan a la estación, sin embargo si de aquí a un año, cinco años, veinte años se atreviese a pasar alguno por acá, no duraría en subirme al primer vagón, para empezar allí otra historia personal, podría entonces ver en mi rostro la satisfacción de aquel que reconoce cuando un instante es perfecto, de aquel que se impregna de la inmensidad que se desborda ante ella y la deja entrar para que esta la transforme. Entonces quizás llegue el momento en que despojada de culpas me levante, y por primera vez camine libre hacia el firmamento, inmune a cualquier causa o efecto.

En ese tren que abordaría, recorrería el mundo a través de mis letras, aprovecharía entonces para conocer esos lugares que ahora solo contemplo en la TV, en uno que otro libro o en algún cuento de los cuales ya he escrito, no cabría duda de que escribiría el pasar del tiempo, dedicaría mis letras a la psicología, la filosofía y la literatura. Viajaría si es posible, a todos los rincones del mundo donde pueda difundir mis conocimientos, llenaría mi vida de poesía y la compartiría con todos aquellos que quieran escuchar y aprender a través de mis versos. Dedicaría mi tiempo al aprendizaje constante, a la lectura, y al arte contemporáneo. Desearía entonces, sentarme bajo la sombra de un sicomoro y escribir algunos versos dedicados al amor y a la vida. Aprovecharía de ese viaje para contemplar la vejez de mis padres y lo que estos tengan que aportarme, degustarlo tanto que en su lecho de muerte no tenga nada sobre qué arrepentirme. Aprovecharía del futuro para entregarme en cuerpo y alma al amor, recorrería el tren en búsqueda o compañía de ese alguien que quiera dibujar nuestra historia en pergamino, sin temores, ni prejuicios, amándonos en libertad, y si las circunstancias desean que nos apartemos, que seamos capaces de poder abandonarnos sin el látigo del castigo y el odio por habernos separado. Aprovecharía mi vida para abrirle la ventana a la vejez y aceptaría sin condiciones la llegada del fin de mis días, aceptando ese presente tardío donde pueda decir: “Ahora veo, existo, muero y disfruto aquí, en cada aliento. No hay gritos ni rencores en mi puerta, jorobas ni muletas; y mis ventanas están abiertas, dispuestas a los juegos de las hojas que las corrientes arrastran hasta mi hogar.  Ya no me adelanto a mis pasos, ni doy importancia a mis huellas. Mi boca ríe, saborea las palabras, los frutos y la lluvia que desciende por mi frente con la misma intensidad. Y las nubes llameantes que pasan sobre mi casa regalan a mis ojos su belleza. Ahora soy presente latente en todo momento, y la importancia está en todo, porque todo es importante. La vida es viviendo, y estoy aquí, atenta a su danza, apoderándome de cada instante.”


Aprovecharía finalmente, mi instancia en ese tren como una forma de merecimiento, de oportunidad, de darme la opción de seguir adelante, sin finales ociosos o cortantes, sino con la opción que da el tiempo de vivir infinitamente, inmersa en la posibilidad, pues al fin y al cabo el tiempo no tiene final.

Carlotta de Borbonet
Juli P. Lizcano Roa
INDICIOS 2019-20