Fred Fred Fred me encanta tocar la
guitarra cuando tu estas, siento que existo, y me gusta ver como mi respiración
se mezcla con el aire a través de colores que salen por mi nariz, amarillo,
rojo, azul aguamarina, simplemente hermoso, es tener el arco iris en mi propia
habitación, a Oliver le encanta cuando se hacen figuras y se van diluyendo
hasta que desaparecen. Anoche salimos con Oliver pero no fue nada divertido,
sentía que las casas nos perseguían y que la calle se volvía más angosta cada
vez que daba un paso, me tire al suelo tapándome los oídos buscando un lugar
donde refugiarme, pero todo lo que hacía empeoraba, y cuando volvíamos al
apartamento caminando rápidamente por la séptima con 57 , vi a alguien parado
sobre la cera de al frente y me vi ahí parada, como si nada, llevaba el pelo
recogido y en la mano un libro grueso al que no alcance verle el nombre, me
veía demacrada, como si la muerte hubiese llegado anticipadamente sobre mi
cuerpo, Oliver me hablaba, creo que intentado preguntar qué me pasaba, pero yo
no lograba entenderlo, todo en un momento se volvió oscuro. Creo que la cárcel esta dentro de mí, y estoy pagando una cadena perpetua que aún no logro comprender.
Fred tengo miedo, quiero que te
quedes estos días conmigo, te lo suplico. Desde esa noche, no he vuelto a ver a
Oliver, me pregunto si le paso algo. Greg llamo, dijo que viene esta tarde, a
la misma hora de siempre, me dijo que se sentía curiosamente feliz y que venía
porque quería escribir poesía y leer en voz alta a Gibrán. Las manos se me
duermen, quiero descansar...morir tal vez.
Fred acompáñame mientras duermo,
quiero que seas el primero que vea cuando me despierte, no te preocupes por mis
lágrimas, solo estoy un poco cansada y triste, te quiero tanto...
Euterpe © - Voces alucinadas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por leerme :)