domingo, 30 de noviembre de 2014

FRAGMENTO # 31



Tal vez nos hemos herido sin querer, tal vez vos ya no me queres como antes, tal vez la eternidad acorto el tiempo, tal vez nuestras bocas se extraviaron en el camino y nuestros corazones se han perdido en el desierto, tal vez el invierno tronco nuestras ramas y el amor ha caído bajo un puente, tal vez el miedo ya reposa en el interior de nuestras almas o tal vez nuestro cariño se ha quedado en ese pasillo del sanatorio silencioso en que incurrimos cuando sin saber nos habíamos perdido en el túnel de la muerte y el desasosiego. Tal vez el silencio ahorco nuestras palabras y ahora yo me encuentro aquí, buscándote a tientas mientras el frío ahoga la esperanza de encontrarte de nuevo. 

Carlotta de Borbonet ©

viernes, 28 de noviembre de 2014

LA FELICIDAD DESDE EPICURO Y ARISTÓTELES


“Hay que estudiar los métodos de alcanzar la felicidad, porque, cuando la tenemos, lo tenemos todo, y cuando no la tenemos lo hacemos todo para conseguirla.”

El siguiente ensayo girará en torno a responder la siguiente pregunta: ¿Qué es la ataraxia o la felicidad para Epicuro y Aristóteles? Para ello tomaré como referencia dos de los textos  más importantes que constituyen la filosofía de estos dos autores, como lo son sus concepciones físicas, canónicas y  éticas: el primero es la Carta a Meneceo y; el segundo texto es la Ética a Nicómaco.

La felicidad, tomada desde Aristóteles y Epicuro constituye la aplicación de la sabiduría a la vida, la cual fomenta el despliegue de certezas, costumbres y virtudes que sustentan la experiencia de una vida bienaventurada en torno al concepto del sabio (es decir, del filósofo). Desde aquí se parte de la idea, que el bien y la felicidad son concebidos por los seres humanos a imagen del tipo de vida propio de cada cual. Pero por un lado, para Aristóteles los seres humanos tienden por naturaleza a la felicidad, como perfección de la vida propia y estrictamente humana, que es la vida según la razón. Así, la felicidad, está determinada esencialmente como una continuidad y una sucesión de actos felices, es lo que sitúa y da sentido al placer, la riqueza, el poder, etc. Sin embargo, el tema de la felicidad desde Aristóteles también gira en torno a la política, donde se la vincula con la polis cuyo tema lo trabajó en su texto la Política, donde resalta que el hombre individual no se basta a sí mismo para alcanzar sus propios fines, ya que necesita de los demás para ello, en torno a esto Aristóteles resalta que aunque la polis surgió por causa de las necesidades del vivir, existe ahora para el bien vivir; en este orden de ideas aquellos que son elegidos para ser felices son los hombres libres que han sido capaces de integrarse a la ciudad, en conclusión la participación en la vida de la ciudad, viene a ser una dimensión de la felicidad de gran importancia para Aristóteles.  

A lo anterior se suma que, desde Aristóteles la felicidad (o la ataraxia) y el  bien vivir tienen un papel en común, el cual es alcanzar los diversos tipos de excelencia que son propios de cada uno de los elementos constitutivos de la naturaleza se los seres humanos, las cuales son: la excelencia del cuerpo, la excelencia del carácter y la excelencia de la inteligencia (logos), en palabras de Aristóteles: “la felicidad es la actividad del alma virtuosa” (1219a). Aristóteles sintetiza el camino de la felicidad desde los siguientes aspectos: 1) el acto propio del hombre consiste en realizar actividades y obras que fortalezcan el alma en relación con el principio racional (o el logos); 2) el acto de un hombre bueno es hacer su propia obra; 3) dado que cada obra se realiza bien según la perfección que le es propia, se sigue que el bien de la actividad del hombre es el resultado de su realización según su perfección; 4) hay varias perfecciones, según la mejor y más perfecta. A esta secuencia, Aristóteles agrega un elemento fundamental para precisar la esencial de la felicidad y es que todo esto, hace que la vida sea completa. En definitiva, la felicidad solamente puede cultivarse allí donde hoy el hombre es libre.

La felicidad según Epicuro, consiste en la serenidad que resulta del dominio del miedo, en torno a los dioses, a la muerte, al dolor y la vida futura; en palabras de Epicuro:
“El recto conocimiento de que la muerte nada es para nosotros hace dichosa la mortalidad de la vida, no porque añada un tiempo infinito, sino porque elimina el ansia de inmortalidad. Nada temible, en efecto, hay en el vivir para quien ha comprendido que nada temible hay en el no vivir.”

En este orden de ideas, el pensamiento de Epicuro guarda estrecha relación en torno al pensamiento de Aristóteles, incluso Epicuro también proyecta un ideal de sabiduría práctica y una insistente vocación por la libertad, la felicidad entonces es el resultado de un constancia práctica, de seguir unas reglas cotidianas de vida acordes con el orden de la naturaleza, las cuales serán la base para fundamentar una teoría del conocimiento. Así la filosofía como el puente que nos con la felicidad, debe estar basada en la autonomía y en la tranquilidad del ánimo o ataraxia, la filosofía entonces es una actividad que cualquier persona, independientemente de sus características (edad, condición social, etc.) puede y debe realizar. Por esta razón la felicidad más allá de una noción abstracta a la que se llega de manera trascendente como la proponen Platón o Aristóteles, constituye un punto de partida para los hombres, ya que la felicidad no es algo que se alcance sino que se experimenta y se vive.

Sin el peso de un pasado que no se puede cambiar, ni la opresión de un futuro que no se puede conocer, el hombre libre debe vivir el presente, sin otra razón que la de vivirlo y ser consciente de ello. Por otro lado Epicuro sostiene que aunque el placer es un bien y el dolor un mal, no es inteligente elegir siempre el placer y rechazar siempre el dolor, ya que lo que debemos haces es rechazar los placeres a los que le siguen sufrimientos mayores y aceptar dolores cuando se siguen de ello placeres mayores. Antes de obrar hay que pensar cuidadosamente el placer o el dolor que se seguirá de ello y establecer un balance entre el placer y el dolor que estas puedan llegar a provocar. Sin embargo, no hay que renunciar a los placeres corporales sino ordenarlos y administrarlos de cara al bienestar físico y espiritual. La razón para Epicuro, definitivamente representa un papel decisivo en lo que atañe a la felicidad, ya que esta nos permite alcanzar el estado de total sosiego (ataraxia), de absoluta imperturbabilidad y ante todo nos da libertad ante las pasiones, los afectos y los apetitos. El sabio para Epicuro alcanza la vida buena y feliz gracias a esta autonomía frente al dolor y los bienes exteriores, a los amigos con los que convive y a su aislamiento respecto a la vida social.
Finalmente quiero terminar con estas palabras de Epicuro que hacen parte de su texto “Carta a Meneceo” que ilustra de una forma bella lo que es el trabajo del filósofo, que no gira en torno a solo buscar conocimiento, sino también ir en busca de esa felicidad coartada por una sociedad materialista:

“Que ninguno por ser joven vacile en filosofar, ni por llegar a la vejez se canse de filosofar. Pues no hay nadie demasiado prematuro ni demasiado retrasado en lo que concierne a la salud de su alma. El que dice que el tiempo de filosofar no le ha llegado o le ha pasado ya es semejante al que dice que todavía no le ha llegado o que ya ha pasado el tiempo para la felicidad. Así que deben filosofar tanto el joven como el viejo; éste para que, en su vejez, rejuvenezca en los bienes por la alegría de lo vivido; aquél, para que sea joven y viejo al mismo tiempo por su intrepidez frente al futuro. Es, pues, preciso que nos ejercitemos en aquello que produce la felicidad, si es cierto que, cuando la poseemos, lo tenemos todo y cuando nos falta, lo hacemos todo por tenerla”.

REFERENCIAS
Aristóteles. Política, I, II, 1.253a 15-17.
Aristóteles. Ética a Nicómaco, I, VII, 1.098a 1-3.
Aristóteles. Ética eudemia, II, 1. 1219a 28-35.

Epicuro, Carta a Meneceo. 

jueves, 27 de noviembre de 2014

LOS LLANTOS DEL BOSQUE



Se remueven las olas
del cielo, mientras el
infierno abre las puertas
a mi infiel destierro.
Mi alma se desvanece
sobre el llanto del 
desconsuelo cuando mis
lágrimas cubren su sombra 
que se ha apartado del
 destino. Mueren las aves, 
sus vuelos hunden las 
brisas, que rompiendo 
en dos los cielos los 
bosques se abren ante 
 caminos desiertos.



Carlotta de Borbonet ©

miércoles, 26 de noviembre de 2014

FRAGMENTO # 30


Me duelen las entrañas, el Malboro pasa por mi garganta como una válvula de oxigeno lo suficientemente profunda como para secar las lágrimas que se posan debajo de mis amígdalas ya negras de tanto fumar. Leo a Sandro Romero y pienso en Charly García, en los 80s, en los 90s, en Cali, en los domingos rotos y los guerrilleros. Ahora todo es diferente con la cuestión de la Internet y los celulares, las cosas se celebran a destiempo porque nada es suficiente para calmar el hambre del capitalismo, pienso en Cerati y en lo agradecido que debe estar al saber que no lo despertaron antes, porque aún no ha pasado el temblor. El mundo se hunde, y pocos nos interesamos por él, no somos activistas, ni creadores de fuentes ambientales reutilizables, ni veganos, ni feministas, o algo por el estilo. Y eso pasa porque sencillamente esperamos a que otros lo hagan por uno, o porque por alguna extraña razón no tenemos la misma energía, de esa que producían nuestras abuelas en tiempos en que la comida era natural, o porque simplemente el cansancio llega a nuestros cuerpos y se instala como una garrapata y entonces, sin darnos cuenta nos despertamos en un cuento de Kafka tratando de no pronosticar los días en los que te escurrirás en el tiempo para besar la vida a la mitad de la lluvia.

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

AUXILIO FUNERARIO



Desprendámonos del olvido
porque no hay auxilio funerario
que transforme este agotamiento
en ilusiones, pues tuyas son las 
palabras que cimentando el tiempo 
oscurecen la luna bajo el espectro 
de bellotas lineales que han olvidado
que los crayones son para colorear
y que las estrellas son el ámbar 
de los sueños, territorio del
silencio y las letras celestes
que desnudas rebotan las balas
sobre saúcos de oro y sepia. 


Carlotta de Borbonet ©

martes, 25 de noviembre de 2014



Carlotta de Borbonet ©

TRIP


A Chaparro Madiedo.


Me preguntas qué hice anoche.
Hable con un perro llamado
Doggy en la 63 con séptima, le cante
a la alborada una canción de Fito
a capela, subí a un tranvía de
colores psicodélicos, hable con la
Luna de mis sueños y mis pesadillas, 
luego por alguna extraña razón me vi
con Chaparro y Caicedo en una
ambulancia con olor a whisky y marihuana
iban acompañados de un gato llamado Pink
Tomate que maullaba "I want a trip trip trip"
mientras el infierno nos abría sus fauces
ante puñados de voces inconsistentes
que acudían al llamado de nuestras
venas rotas en un baño de la estación
del Norte, donde alguien frente a un
espejo nos miraba con desasosiego:

era yo, vestida de olvido.


Carlotta de Borbonet ©

lunes, 24 de noviembre de 2014

PORQUE VOS SOS


sos una puta, sos el infierno
sobre la tierra, sos la heroína que
recorre mis malditas venas cada
noche de Enero 
aquel que te bese sabrá que sos 
amarga como los limones por dentro y
por fuera, sos una cualquiera y una 
coqueta detestable, sos una bohemia 
de cárceles y bares, sos arribista
y puritana a tus anchas pero no
a tus espaldas
te he visto perder el control de tus
deseos y cómo te alejas de Dios para
irte a culiar con no sé quién en el 
infierno y es que vos sabes que sos 
ordinaria, amante de los desenfrenos y
el alcohol
pero me encantas y es que...  

tus senos
   tus besos
        tus nalgas
           tus hombros
                tu sexo

mantente alejada del olvido y de las
cualidades de las mujeres de casa, vos
vístete como querás, porque vos sos
mi nena.

Carlotta de Borbonet ©

domingo, 23 de noviembre de 2014

FRAGMENTO # 28



Te invito a caminar a mi lado. Puede ser que se nuble el día como puede ser que...salga el sol.
Carlotta de Borbonet ©

FRAGMENTO # 27



Como Charles Bukowski esta noche sólo tengo ganas de beber y escribir. Para luego, terminar vuelta mierda con algún verso de Bretón o Pizarnik.
Carlotta de Borbonet ©

miércoles, 19 de noviembre de 2014

FRAGMENTO # 26



Y sus entrañas se abren al unísono mientras el miedo la cubre ante el vacío hiriente que carcome su corazón. Es el destino, la culpa y la miseria quienes le abren la puerta del infierno, antes de que una voz alucinada y ebria la conduzcan al desespero.
Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

FRAGMENTO # 25



Que me guste leer no quiere decir que sea de izquierda o de derecha. Hay temas como el político que para mi, no vale la pena discutir. Sin embargo, hay que conocer las propuestas de los candidatos y ante todo salir a v(b)otar. Pues he aprendido que conversar sobre temas políticos o religiosos nos llevan a la discordia, en otras palabras a un infinito sin retorno donde no hay respeto por la diferencia y donde todos creen tener la razón.

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

lunes, 17 de noviembre de 2014

ANÁLISIS LITERARIO DEL CUENTO “EL SUR” DE JORGE LUIS BORGES


  "A la realidad le gustan las simetrías y los leves anacronismos"

El texto de Jorge L. Borges representa un viaje espacial entre lo que considero yo: la cordura y la locura. Que permitieron a través de una lectura detallada transportarme a diversos espacios entre los que parece ser un sanatorio y el sur de Argentina las cuales considero podrían hacen parte de la trama del escrito en donde se describe superficialmente la historia de Juan Dahlmann, como un joven bibliotecario orgulloso de sus raíces argentinas y germanas propias de una historia en la que hacían parte sus antepasados como emigrantes y que evidentemente influyó en su personalidad solitaria e inexpresiva, amante de la música y de Martín Fierro. Pero ante la monotonía de una vida sin sentido, alejado de sus sueños de vivir en la llanura y no en la ciudad un golpe en la cabeza hará que como lectores nos confundamos entre lo que es real y lo que no. Como lo señala Mieke Bal, este método es el que nos facilitará la discusión sobre cómo se encuentra estructurado el cuento de Borges, de tal manera que la descripción será el primer paso en el estudio del relato, antes que la atribución del significado y a la interpretación de este.

La estructura del cuento “El Sur”, se distribuye de la siguiente manera: 1. Como primer evento se encuentra una breve descripción de Johannes Dahlmann, el abuelo de Juan Dahlmann quien en el año de 1871 arribó a Argentina proveniente de Alemania; 2.  Seguido se introduce al personaje principal del cuento que es Juan Dahlmann al cual se le atribuyen características de un hombre amante de la música, y orgulloso por sus raíces extranjeras y latinas; 3. Aparece luego Francisco Flores, el abuelo materno de Juan que muere a manos de los indios de catriel y que obligan al protagonista a no apartarse de la ciudad y a añorar esa tierra sureña que se convierte en un sueño lejano imposible de alcanzar pero que sabe que lo espera; 4.  El destino (cansado de la monotonía) del protagonista se ve enfrentado a vivir un evento en su vida que lo llevó a presenciar el infierno aun sin haber muerto, y que días después terminó en un sanatorio agobiado por el insomnio y los delirios; 5. De repente, Juan Dahlmann se encuentra fuera del sanatorio en un tren rumbo al sur de Argentina mientras leía Las mil y una noches, y que lleno de recuerdos hacía que su vida tuviese algo de sentido; 6. Horas después el protagonista se encuentra en una estación de tren, la cual no era la que tenía planeado arribar, sin embargo dicho evento lo hacía feliz; 7. Finalmente, Juan llega a un almacén donde decide sentarse a comer algo, pero de improvisto se ve enfrentado con unos clientes del establecimiento donde minutos más tarde se librará contra ellos.
Teniendo en cuenta la descripción anterior, nos podemos dar cuenta de los diferentes matices que le da Borges a su cuento, el cual usa diversos elementos para contar la historia en donde hay complementos de misterio e historiográficos; desde Mieke Bal y V. Propp, se podría deducir al emisor como el mismo narrador de la historia, es decir Borges y al destinatario, el lector. La base (estructura) es la cultura y la superestructura es la ideología, las cuales giran en torno a la Argentina de 1939, y  donde hay evidentemente una secuencia lógica y cronológica de la fábula que es lineal; la elipsis se da en el uso de largas pausas descriptivas y ampliaciones donde Dahlmann (el protagonista), a través de una visión fantástica nos acerca a la muerte y a esa parte de la argentina nacionalista y sincrética entre la división de lo que era la ciudad de entonces y las afueras de esta, que para Propp conservan un orden que va encaminado a enriquecer la intriga y el nudo del cuento.

Al anterior análisis se suma las concepciones de Umberto Eco, ya que él resalta que existe una relación directa entre el lenguaje, el pensamiento y la creación literaria, donde las dimensiones psicológicas e ideológicas lo que harán es dificultar las interpretaciones del texto, lo ideal es que este proceso interpretativo consista en un deseo de descodificación de un mundo que lastimosamente es el nuestro, y el cual está constituido de lenguaje y que pertenecen al mundo propio del escritor cuyo principal punto de referencia es el universo retórico y poético, las cuales nos permiten ver los temas centrales de éste cuento: el delirio o la fantasía, el sueño, el deseo reprimido, y finalmente, la muerte; que en vez de desenredar, lo que hacen es complicar la trama de esta, propias de textos problemáticos y no populares. Pero como lo dijo Propp en su texto Morfología del cuento, los cuentos han tenido la función de poner en guardia a los lectores acerca de los peligros que hay en el mundo, y “El Sur” invita al lector a cuestionarse y obligatoriamente se ve expuesto a enfrentar una guerra contra sí mismo, incluso en contra de su moralidad e ideología, que se puede ver ejemplificado en las siguientes frases:

“Amigos y parientes lo visitaban y con exagerada sonrisa le repetían que lo hallaban muy bien. Dahlmann los oía con una especie de débil estupor y le maravillaba que no supieran que estaba en el infierno”.

 “Las miserias físicas y la incesante previsión de las malas noches no le habían dejado pensar en algo tan abstracto como la muerte”.

“Sintió que si él, entonces, hubiera podido elegir o soñar su muerte, ésta es la muerte que hubiera elegido o soñado”.
“Mañana me despertaré en la estancia, pensaba, y era como si a un tiempo fuera dos hombres: el que avanzaba por el día otoñal y por la geografía de la patria, y el otro, encarcelado en un sanatorio y sujeto a metódicas servidumbres”.

Sumado a lo anterior, Eco resalta que es importante que el escritor tome conciencia de sus novelas en función de su superestructura, dejando atrás la narratividad degradada y abriendo espacio a las novelas conservadoras y reaccionarias, reconstruyendo así la metalingüística que no se limitará solo a una trama sentimentalista sino un pretexto para abrir espacios a la crítica, desmontando el mecanismo emocional y abriendo un espacio a la racionalidad que lleve al lector a solucionar los problemas de la trama y de la novela sin que sea el escritor quien lo haga, e incluso a dar una solución alternativa, y como se evidencia en el final del cuento:

Dahlmann empuña con firmeza el cuchillo, que acaso no sabrá manejar, y sale a la llanura.

Para esto Propp y Bal fueron fundamentales respecto al estudio detallado de las particularidades que hay en la narración, que son los fundamentos para que podamos distinguir entre un cuento y lo que nos narran los mitos y las religiones. Por otro lado, aunque pareciera que hay un desarrollo cronológico en el cuento de Borges, lo que existe es una creación de mundos paralelos por parte de Dahlmann quien es el que sufre de delirios. Encontramos a su vez personajes estáticos como su abuelo y Francisco Flores, secundarios como la mujer que lo ve derramando sangre, entre otros como el inspector del tren; y por último, está el narrador omnisciente e icónico que a través de signos referencian la realidad y que permiten estudiar la cultura; pues una vez obtenido esto, continuar el trabajo o ampliarlo en el curso de su desarrollo significa rebasar los supuestos del cuento, es decir, transformar el texto en otro género de relato, en otras palabras las analogías y el juego de linajes jugaron un papel fundamental en la estructura del relato, así como también las pautas de lectura que Borges construyo en su texto propias de la intertextualidad y donde el narrador se vio involucrado en un doble proceso, de una dilatación temporal y por otro lado, remitir al lector a horas y momentos exactos del día, como lo evidencia el siguiente apartado:

“Ya el blanco sol intolerable de las doce del día era el sol amarillo que precede al anochecer y no tardaría en ser rojo”.

Finalmente, lo fantástico se construye a través del discurso de Juan Dahlmann que representa esa necesidad del protagonista por corregir su destino, su deseo de morir a la manera de Martín Fierro (propias del relato de sus canciones) otorga un carácter apócrifo al cuento, y el principal elemento de desrealización es  el sueño, el cual sugiere la vacilación de los límites entre lo que es el mundo real y el  mundo ficticio.

Para concluir, estudiar la literatura más allá de lo que esta nos genera emocionalmente es tan solo una parte de lo que nos puede ofrecer, pero cuando nos damos la oportunidad de profundizar su estructura y función como un aporte a nuestros conocimientos solo allí, comprendemos lo enriquecedor que puede ser el arte de escribir, parafraseando a  Aristóteles, la literatura es un acto de creación a través de la escritura con múltiples nociones que permite la verisimilitud y la conjetura. Cabe destacar que la contribución de Propp, Bal, Eco, Aristóteles, entre otros autores ha sido fundamental en la historia de la literatura, ya que nos dan una apertura que va más allá de la descripción de géneros literarios o formas del cuento, pues lo que estos autores nos da es un estudio detallado de las particularidades que hay en la narración que son los fundamentos para que podamos distinguir entre un cuento y otro tipo de textos literarios. Sin embargo, la literatura ha cambiado y mantener las estructuras ya no es de gran interés, al contrario parece ser que cada uno crea sus propias estructuras manteniendo ciertos matices literarios que lo hacen legible. En resumen, la literatura debe ser esa musa que impulse a los lectores y a los escritores a reencontrar el camino estilístico de tal forma que podamos conocer el mundo y así poder comprender de qué estamos hechos, y en donde nos veamos reflejados con los personajes, para al final terminar con esa insania propia de los que son lectores empedernidos, amantes de las revoluciones y críticos de la existencia humana.

Referencias
Aristóteles. (1974). Poética. 1447a – 1462b.
Bal, M. (1990). Teoría de la narratividad. Una introducción a la narratología. Madrid: Catedra.
Borges, J. (1953). El sur. Recuperado de http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/esp/borges/el_sur.htm




Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

LIBERÉMONOS DE TANTA MIERDA



liberémonos de tanta mierda:
del capitalismo y la moda,
de las guerras sin sentido,
de los políticos ortodoxos y
los extremistas, de los reos
y convictos, de la televisión
y la Internet, del silencio y
las protestas, del desempleo
y la hambruna, de las llamadas 
potencias y los tercer mundistas,
de las religiones que abusan
de los derechos humanos, de
los psicópatas y los mentirosos,
del bullying, el machismo y
el feminismo que llevan al
hostigamiento, del materialismo
y los homofobicos, de la tristeza
y los nihilistas, de la muerte 
y el suicidio, del irrespeto por 
las diferencias y de las masas, 
de los hipócritas y los traicioneros, 
del secuestro y el libertinaje,
del alcohol y la heroína, de los 
ancianatos y las clínicas 
psiquiátricas, de la cordura y
las farmacias, del humo de los
cigarrillos y el purgatorio,
de la melancolía y el desamor,
pero sobre todo del olvido
y la indecisión. 

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

domingo, 16 de noviembre de 2014

LET IT GO



un día me voy ir de aquí,
despellejare los mares,
le meare en la cara a los
falsos y engreídos, le
escupiré en la cara a 
los que dicen llamarse
amigos y no lo son.
  
un día sin decir nada
me esfumaré de la faz
de la tierra y la muerte
vergonzosa estará esperándome 
despierta bajo el puente,
ebria y cansada como una
puta intelectual.

un día sin decir nada 
simplemente me iré, no sé 
cómo ni a dónde pero lo 
siento de antemano porque 
sé, que sin querer te fallaré.  

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

sábado, 15 de noviembre de 2014

ALEGORIA DEL SENTIDO Y LA VIDA AL REVÉZ



Y si el cielo se hundiera entre olas de playas saladas, y del mar lloviera granizo de estrellas, quizás la felicidad no sería una utopía y la vida tendría un mayor sentido. Lloraríamos carcajadas de alegría y reiríamos de espasmos llenos de ilusiones y sueños. Los viejos no serían tan viejos y los niños se columpiarían en nubes de barro hechos dinosaurios de colores psicodélicos como sus amigos imaginarios, que serían también nuestros amigos. El arco iris tendría escaleras cubiertas en salsa de chocolate y la tristeza no la conocería nadie. El sufrimiento tan solo sería una palabra más del diccionario de mitologías y cuentos. Los laberintos de Sábato serían carruseles en forma de unicornios a cambio de caballos blancos desgastados por el óxido y el tiempo. La soledad viviría entre nosotros y el miedo a morir no existiría, porque ya vives en el paraíso. El ocaso compartiría las tardes con la Luna y la noche sería iluminada por el sol mientras el tiempo espera su destino, que no dependerá de él, sino de nosotros. Los humanos seríamos infinitos como los dioses, aunque pocos tendrían ese privilegio. La muerte llegaría en el sexo y la vida de un simple suspiro producto de la unión de dos almas bendecidas por los ángeles, esos amigos de los dioses puros y rebeldes ante la existencia. La música sería el producto de una exhalación con ritmos brillantes al son de los días y los meses del año. Las raíces de los árboles serían finitas y conectarían los continentes bajo puentes subterráneos como los de "Alicia en el país de las maravillas". Los idiomas serían tan universales que un beso como saludo y un abrazo como despedida sería suficiente. La guerra entre el cielo y el infierno no existiría porque el odio, la arrogancia y la desmesura es para los inexistentes que no son capaces de comportarse como humanos, ya que por alguna razón no han desarrollado un corazón suficientemente apto para abarcar esos sentimientos que brotan del pecho cuando alguien hace las cosas con amor y pasión. Por eso, si el cielo se hundiera entre olas de playas saladas, y del mar lloviera granizo de estrellas, la felicidad no sería una utopía y la vida tendría un mayor sentido. 

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

miércoles, 12 de noviembre de 2014

FRAGMENTO # 23


y si el cielo se hundiera entre olas de playas saladas, y del mar lloviera granizo de estrellas...

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

FRAGMENTOS # 22



¿y dónde dejo esta parte de mi que se rompe a pedazos, que se ahoga en el silencio, que se desespera en el cansancio de los que no duermen y que además, se quiebra ante sus miedos?


Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano

EL DICCIONARIO DE LOS MISERABLES


Masa: 1|| Dícese de un grupo de tontos que sigue a otro grupo de tontos más grande. 2|| Mezcla de harina y agua que bien preparada se usa para alimentar al grupo de tontos.

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano
Libro: El diccionario de los miserables (2014)

martes, 11 de noviembre de 2014

FRAGMENTO # 21


Recuerdo con cariño ese libro que me regalaste a mediados de noviembre y que aun leo porque tengo las letras pegadas en las huellas de mis dedos, especialmente en el dedo índice con el que suelo pasar las páginas, y la caratula ya se encuentra desgastada por el roce de mi bolso de tanto meterlo y sacarlo cuando me daban ganas de leerlo. Pero ahora me quema, me arden los ojos y lloro cuando no logro terminar alguno de esos párrafos que antes añoraba con desolación. Y es que me he dado cuenta que empiezo a olvidarte, a despegarme de ti, te hallo en otro plano que no es nuestro y entonces me pierdo. Y es que solo quisiera decirte que me muero, que me hundo, que mi sombra ya no me sigue, que me encuentro sola entre el hastío y la locura, que no puedo dormir, que me duele la cabeza y las entrañas, que me emborracho hasta que veo el amanecer pronunciarse por la ventana, que me desvanezco de tristeza y desencanto, que el capitalismo me tiene jodida, que no recobro mi sabiduría y la alegría de los días, que muero infinitamente mil veces cuando intento luchar por la existencia de los pobres que ya no tienen sueños e ilusiones, que te necesito pero que ya no te quiero, que lo único que queda es un rostro desfigurado y una soledad prohibida que a medias se comunica con la rebelión que me liberara del adocenamiento y tal vez del suicidio. 

Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano


Ya no tengo ganas de llorar, solo me quedan ganas de escribir. Que en el fondo es casi lo mismo.
Carlotta de Borbonet ©
Juli Lizcano