21 enero 2022
Viernes
que traes amarradas las horas…el destiempo. Siento una profunda ira y rabia que
carcome mi alma, que no me deja respirar. Abandonarme a lo absurdo es lo que
deseo, y es que todo es tan ausente, tan estático. Me acaricio el rostro.
Lloro. La luna habla, las estrellas sollozan. Me consuelan. Gime Benedetti y
las soledades. Quisiera pensar en algo extraordinario. En el nacimiento del
hombre, en Adán y Eva, en la conquista de América. Quisiera levantar mis
brazos, escribir sobre el cielo azul terciopelo, clasificar los pétalos de una
rosa, consentir a un perro, revivir una novela de Caicedo y gritar a todo
pulmón: ¡Soy única!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por leerme :)